miércoles, 3 de octubre de 2012

El Filosofo



Hijo: Mama, Papa, tengo algo muy importante que decirles, hace tiempo que lo vengo escondiendo pero ya no puedo mas y no quiero que se enteren por otros

Mama: ¿Que pasa hijo? (Angustiada)

Hijo: Yo... yo soy...

Mama: Ay, Dios

Hijo: Eh...

Papa: Escupilo de una vez

Hijo: Yo soy Filosofo

Mama: (Se quiebra en llanto) ¡Ay Dios! ¡No!

Papa: (Agachando la cabeza lleno de desepción) Es peor de lo que me imaginaba

Mama: (Extendiendo sus brazos al cielo) ¡¿Que hicimos mal?!

Hijo: Hace una semana me anote en el CBC de filosofia y letras...

Mama: (Deshecha en lagrimas) ¡Ay! ¡Y cuando pensabas decirnos!

Hijo: (Mirando a la madre de reojo) eh... ahora, mama

Papa: No te preocupes, debe ser una etapa

Hijo: ¡No es una etapa Papa! Ya publique dos tratados

Mama: (Hecha un desastre... es una catastrofe... un despojo de moco y lagrimas que no para con los ojos como dos huevos fritos) ¡Ay, mi hijo, mi hijito! ¡¿PORQUEEEEEEEEEEEEEEEE?!

Papa: Bueno, hijo, vos sos mi sangre y sabe que siempre te voy a querer, aunque seas filosofo, pintor, novelista, musico, actor...

Hijo: Bueno, pa, tampoco te vayas al carajo

1 comentario:

Anónimo dijo...

Jajaja es que hay cada profesión... ok, no es cierto

Saludos!!